Un terremoto de magnitud 7 estremeció este jueves la localidad de Ferndale, California, generando una rápida respuesta de las autoridades locales y estatales. Según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés), el epicentro se ubicó a una profundidad de 10 kilómetros, lo que intensificó su impacto en la superficie.
El temblor activó los protocolos de emergencia en el estado de California, que se encuentra en una de las zonas sísmicas más activas del mundo. Hasta el momento, no se han reportado víctimas mortales, pero sí daños materiales en estructuras y cortes de energía en diversas áreas cercanas al epicentro. Equipos de rescate y personal de emergencia ya se encuentran evaluando la magnitud de los daños y asistiendo a la población afectada.
Ferndale, una comunidad conocida por su arquitectura victoriana y su cercanía a la costa, es parte de la región del condado de Humboldt, una zona que ya ha experimentado actividad sísmica significativa en el pasado. El USGS recordó que los terremotos en esta área son comunes debido a la interacción de las placas tectónicas del Pacífico y América del Norte.
Los residentes reportaron escenas de pánico al sentir el movimiento, con personas evacuando edificios y buscando refugio en zonas seguras. “Fue como si todo el suelo se moviera de un lado a otro, no podíamos mantenernos en pie”, compartió un habitante de Ferndale en declaraciones a medios locales.
El gobernador de California emitió un comunicado instando a la población a mantenerse alerta ante posibles réplicas y a seguir las recomendaciones de seguridad emitidas por las autoridades. Además, se habilitaron líneas de ayuda para los afectados y se establecieron refugios temporales en las comunidades cercanas.
El sismo sirve como un recordatorio de la importancia de estar preparados ante eventos naturales en regiones propensas a movimientos telúricos. Las autoridades continúan monitoreando la situación mientras la población trata de retomar la calma.