Una explosión en un depósito de combustible de la compañía italiana ENI, ubicado en Calenzano, al norte de Florencia, cobró la vida de cinco personas y dejó catorce heridos, dos de ellos en estado crítico, según informó el gobernador de Toscana, Eugenio Giani.
El siniestro, que tuvo lugar el lunes, generó una columna de humo negro visible a varios kilómetros y un fuerte estruendo que alarmó a las comunidades cercanas. Las autoridades locales aconsejaron inicialmente mantener las ventanas cerradas, aunque posteriormente determinaron que la calidad del aire no representaba un riesgo para la población.
La explosión interrumpió temporalmente los servicios ferroviarios regionales, pero las llamas fueron rápidamente controladas, evitando que el fuego se propagara a los tanques de almacenamiento cercanos. Según ENI, la detonación ocurrió en la zona de carga del depósito, y la causa del incidente aún se encuentra bajo investigación.
El incidente pone nuevamente en el foco la seguridad en instalaciones de combustible, mientras las autoridades locales trabajan para esclarecer los detalles del suceso y brindar apoyo a las familias afectadas.