La audiencia judicial de Ismael “El Mayo” Zambada, uno de los líderes históricos del Cártel de Sinaloa, fue aplazada por decisión del juez Brian Cogan, del Tribunal del Distrito Este de Nueva York. Inicialmente prevista para el 16 de junio, la sesión se reprogramó para el 25 de agosto a las 12:00 p.m. (hora local), según documentos oficiales del tribunal.
La postergación fue solicitada de manera conjunta por la defensa y la fiscalía, quienes argumentaron que continúan analizando nuevas pruebas y discutiendo la posibilidad de llegar a un acuerdo antes del juicio. En respuesta, el juez Cogan concedió la moción, considerando “razonable” el aplazamiento para dar continuidad a las conversaciones.
Zambada, de 77 años, enfrenta 17 cargos por delitos relacionados con narcotráfico, lavado de dinero y crimen organizado. Fue detenido en julio de 2024 en un aeropuerto próximo a El Paso, Texas, junto con Joaquín Guzmán López, hijo del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán. Desde entonces, se encuentra bajo custodia de las autoridades estadounidenses.
Uno de los temas centrales del caso es la posible aplicación de la pena de muerte, que aún está siendo evaluada por el Departamento de Justicia. En febrero pasado, el propio Zambada solicitó ser repatriado a México, alegando haber sido “secuestrado” por Guzmán López, con la esperanza de evitar una eventual condena capital.
Su abogado, Frank Pérez, declaró que su cliente está dispuesto a declararse culpable si con ello puede esquivar la pena de muerte. Esta disposición ha influido en las conversaciones con la fiscalía, aunque hasta el momento no se ha alcanzado un acuerdo definitivo.
Paralelamente, Joaquín Guzmán López, actualmente en Chicago, también mantiene negociaciones con las autoridades estadounidenses. Su hermano, Ovidio Guzmán, estaría cerca de formalizar un acuerdo de culpabilidad, con una audiencia clave programada para el próximo 9 de julio.
El caso de Zambada continúa siendo uno de los procesos más relevantes en la lucha contra el narcotráfico en Estados Unidos.