La empresa china BYD, uno de los principales fabricantes de vehículos eléctricos en el mundo, ha cancelado sus planes para establecer una planta de producción en México, aludiendo a la incertidumbre generada por el panorama geopolítico y comercial actual. La decisión fue confirmada por Stella Li, vicepresidenta ejecutiva de la compañía, durante un acto en Bahía, Brasil, donde BYD inaugura su primer complejo industrial fuera del continente asiático.
Li señaló que la creciente tensión entre Estados Unidos y China ha impactado directamente en la toma de decisiones estratégicas. “Queremos tener mayor claridad antes de invertir en mercados que podrían verse afectados por nuevas políticas comerciales”, afirmó. Entre las inquietudes destacan los aranceles promovidos por el presidente estadounidense Donald Trump, quien ha expresado su intención de imponer restricciones a empresas extranjeras con vínculos con China.
Durante más de un año, BYD analizó ubicaciones potenciales en México como parte de su estrategia de expansión en América Latina. Sin embargo, la compañía suspendió sus planes tras no recibir la aprobación del Ministerio de Comercio de China, que expresó preocupación por una posible transferencia tecnológica involuntaria hacia Estados Unidos a través de la planta mexicana.
Aunque el proyecto en México ha sido descartado por el momento, la empresa reiteró su intención de continuar su crecimiento global. No obstante, subrayó que no existe un calendario definido para retomar las inversiones en la región, mientras persista la volatilidad en las relaciones comerciales internacionales.