Una nueva especie de sapo ha sido descubierto por científicos brasileños y si bien su belleza es incuestionable debido a su vívido color naranja fluorescente, esta especie identificada científicamente como la  Brachycephalus rotenbergae es ultra venenosa y pese a solo medir 2,5 centímetros, su veneno es capaz de intoxicar a un humano.

El veneno de esta hermosa pero peligrosa criatura es transmitido por las glándulas de su piel; esta nueva especie, recientemente identificada en Brasil por expertos quienes determinaron que tiene placas óseas en el cráneo y en la espalda que brillan en verde a través de la piel bajo la luz ultravioleta (UV), pero aún no pueden explicar el motivo de esta característica.

El curioso anfibio fue descubierto en  la Cordillera de Mantiqueira en el estado de San Pablo, en un bosque a lo largo de la costa atlántica del este brasileño.

Posee un veneno mortal

La nueva especie ha sido calificada como altamente venenosa y parcialmente mortal para pequeños mamíferos y aves, aunque  para los humanos su amenaza es mínima, así lo dio a conocer el  autor del estudio, Ivan Nunes, de la Universidade Estadual Paulista de Brasil.

En este sentido el especialista explicó que los humanos pueden tocarlos con las manos desnudas, sin embargo, no así con los ojos o la boca, pues con ello se eleva el riesgo de contraer enfermedades o sufrir de envenenamiento.

“Simplemente no podemos tocar los ojos o la boca después de manipular al sapo, pues si hacemos eso, podemos sentirnos un poco mal, pero lavarnos las manos puede resolver el problema”, aclaró el experto.

La toxicidad de estos sapos se debe a la presencia de tetrodotoxinas sustancias que interfieren con las señales transmitidas entre los nervios y los músculos, lo que hace que los músculos se paralicen, dicho compuesto también se encuentra en el mortal pez globo Fugu.

Con información de El Heraldo de México