Raúl Trejo Sánchez fue detenido en la ciudad de Monterrey, de donde es originaria su esposa, una neoleonesa acaudalada, dueña de una fortuna que quizá mucho tuvo que ver con la prosperidad del vallense ahora acusado de asesinato en primer grado en contra de Julio César Galindo Pérez, quien era presidente de la COPARMEX, en el estado de San Luis Potosí.

Pero el químico farmacobiólogo (UASLP, 1992), quien recibió de manos del gobernador un reconocimiento como empresario distinguido en el 2018, ya había sido detenido el mismo día del asesinato de Galindo Pérez, el lunes primero de marzo por la noche, y tan solo unas horas después de que fueron capturados los cuatro sujetos acusados de perpetrar el asesinato en Avenida del Potosí, de la colonia Lomas, al poniente de la capital potosina.

Trejo Sánchez era proveedor de los Servicios Estatales de Salud cuando Mónica Rangel Martínez, la ahora candidata priista impuesta en MORENA, era la titular. Contratos que llevó a cabo el hombre de negocios vallense fueron objeto de solicitudes de información en la Unidad de Transparencia de la dependencia. Como consta, por ejemplo, en el acta de la “Décima Sesión Ordinaria” del 29 de octubre del 2019.

 

---SUERTUDO COMO EL SUPUESTO ESTAFADOR “GABO SALAZAR”---

Al ser beneficiario de adjudicaciones millonarias, despertó la inconformidad de terceros perjudicados que apelaron a la transparencia para verificar la legalidad o no de tales transacciones.

Por las mismas fechas, Gabriel Alan Salazar Soto, señalado en 2020 como defraudador, recibía también un trato especial con negocios cuantiosos que la titular de los Servicios de Salud le autorizaba, y por lo cual la ahora aspirante a gobernadora enfrenta denuncias penales de diferentes entes, entre ellos del Frente Ciudadano Anticorrupción (FCA), que apenas el pasado 13 de marzo presentó una denuncia ampliada.

 

Al respecto, José Guadalupe González Covarrubias, vocero de Ciudadanos Observando, apuntó el 2 de mayo en sus redes sociales: “Esta detención puede derrumbar la campaña de Mónica Rangel, ya que, durante este sexenio, este químico recibió pagos por más de 250 millones de pesos en los Servicios de Salud, y se viene otra investigación a fondo”.

Se ignora cómo puede la detención del acusado de homicidio “derrumbar” la campaña de una candidata que cuando fue elegida como tal ya tenía similares señalamientos por malos manejos y corrupción, y que ella niega repetidamente, como lo acaba de hacer al periodista Carlos Loret de Mola, en la entrevista que éste publicó el 30 de abril en su programa Latinus.

---FUE LOCALIZADO Y NO PRESENTADO---

Por otra parte, fuentes de Ciudad Valles indicaron a La Roja que Trejo Sánchez fue ubicado por policías de la Fiscalía General del Estado el mismo día de los hechos, y tan solo unas horas después que se detuviera a los cuatro acusados de llevar a cabo el asesinato material del Julio César Galindo.

Como se informó, ellos fueron detenidos ese mismo primero de marzo y se supone que bordo todavía de la camioneta que habían usado para cometer el ilícito. Entre ellos, uno de los sujetos llamó la atención en especial, pues su nombre aparecía como candidato a alcalde en Chalma, Veracruz, entidad de la república donde Raúl Trejo tiene empresas, entre ellas, se dice que una concesionaria de la Volkswagen.

Las mismas autoridades han dado a conocer que los motivos del homicidio tenían que ver con operaciones de negocios mal llevados entre Julio Galindo y Raúl Trejo. Rastros de las actuaciones jurídicas de esas diferencias constan desde el 2018 en la página “Buho Legal”.

Ellos mantuvieron por muchos años relaciones de negocios, y era conocida la profunda amistad que los unía, compartiendo utilidades en un hospital de Ciudad Valles, en empresas concesionarias de autos, entre otros.

Este último negocio, de acuerdo a lo que ha trascendido, fue lo que provocó en ellos las profundas diferencias que al parecer Trejo no encontró otra forma de darles salida más que con el crimen; por más que sus vecinos y amigos de Ciudad Valles estén consternados e incluso duden de su participación, pues la conducta que observaba no la ven compatible con tan graves suceso del que ahora se le acusa.

---OPERATIVO EN TAMBACA---

El citado día del crimen, el 1 de marzo, ya por la noche, se registró un operativo policial grande allá por el municipio de Tamasopo, a la entrada de la Huasteca Potosina.

Los pobladores del rumbo de Tambaca y los automovilistas que transitaban por la supercarretera a Valles atestiguaron el retén de diversas corporaciones. El asesinato del empresario y su cargo en la Coparmex había puesto al gobierno del estado y a la Fiscalía a trabajar de manera intensa y eficiente en este caso, lo que no hacen con todos los crímenes, por supuesto.

Ese operativo fue exitoso y se logró la captura de los sospechosos materiales del crimen, los cuales fueron sometidos a crueles interrogatorios, terminando por confesar quién les había ordenado el asesinato. De tal forma, que no fue difícil localizar al empresario señalado de ser el autor intelectual.

No obstante, la Fiscalía General del Estado (FGE) esperó dos días para dar a conocer la captura de los sospechosos, que desde entonces se encuentran recluidos en el penal de La Pila, en la capital potosina. Sin embargo, Raúl Trejo nunca fue presentado a las autoridades, ni se reveló que era el presunto autor intelectual del homicidio.

Pero en Ciudad Valles sí transcendió que Trejo se les había “escapado”, “escabullido”, o llegado a “arreglos” con los agentes que lo detuvieron o que al menos lo tenían ubicado en espera de una orden de aprehensión. Mismas órdenes que al parecer no necesitaron los agentes para “atorar” a los cuatro acusados de ejecutar el asesinato.

Mientras tanto, y por esos primeros días de marzo pasado, en círculos políticos y sociales de San Luis Potosí también se comentaba “en corto” que ya se sabía quién era el asesino intelectual, pero que se trataba de un personaje “influyente” al que no se quería detener.