Árboles de Navidad importados, bajo la lupa de Profepa

En nueve puntos se aplica la revisión de Profepa a los árboles de Navidad importados desde EU y Canadá; el fin es evitar el ingreso de plagas o enfermedades de importancia.

Los árboles de Navidad importados serán revisados en nueve puntos de ingreso a territorio nacional en Baja California, Coahuila, Chihuahua, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas, luego de que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), puso en marcha, con al menos 15 días de retraso, el programa de verificación.

Por cuestiones de austeridad, serán las representaciones de la Profepa en las entidades las que realicen las revisiones, sin apoyo de los inspectores federales que cada fin de año eran enviados desde oficinas centrales para colaborar en estas acciones, que buscan frenar la entrada de plagas y enfermedades de importancia cuarentenaria (que no existen en México).

En diciembre de 2020, Excélsior dio a conocer que, por primera vez en 15 años, la autoridad ambiental había cancelado el operativo de verificación de pinos de Navidad en puertos, aeropuertos y fronteras, por donde ingresan entre 900 mil y un millón de árboles, provenientes principalmente de Oregón y Carolina del Norte, Estados Unidos, debido a la falta de recursos por los recortes al presupuesto.

Los inspectores que eran comisionados para apoyar a las delegaciones estatales recibían boletos de avión ida y vuelta, viáticos diarios para alimentación y hospedaje, así como recursos para el pago de gasolina de los traslados a las garitas y las aduanas.

Puntos de inspección de árboles de Navidad

Los puntos de inspección de árboles de Navidad se ubican en:

  1. Mexicali y Tijuana, en Baja California.
  2. Piedras Negras, en Coahuila.
  3. Zaragoza, en Chihuahua.
  4. Colombia, en Nuevo León.
  5. San Luis Río Colorado y Nogales, en Sonora.
  6. Reynosa y Nuevo Laredo, en Tamaulipas.

Proceso de revisión de los árboles navideños

Hasta 2019, el personal capacitado realizaba revisiones documentales y físicas de los contenedores, muestreo al azar de los árboles, así como pruebas biológicas cuando se detectaba o se presumía la existencia de alguna especie exótica.

Las muestras se analizaban en el Laboratorio Nacional de Referencia Forestal de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), con el fin de que se hiciera la determinación taxonómica y se dictaminaran las medidas fitosanitarias correspondientes, que podrían ser la quema de todo el embarque o el retorno a su lugar de origen.
Las plagas interceptadas son principalmente insectos conocidos como picudos y gorgojos (Cylindrocopturus furnissi), (Otiorhynchus rugosostriatus, Sciopithes obscurus), mosquita agallera (Contarina constricta), avispas (Polistes dominula), así como palomillas de la familia Pyralidae.

Los árboles importados son de las variedades Abeto de Douglas (Pseudotsuga menziesii), Abeto Noble (Abies procera), Abeto de Nordmann (Abies nordmanniana), Abeto Grande (Abies grandis), Abeto de Fraser (Abies fraseri) y Abeto de las Rocallosas (Abies lasiocarpa).

El último registro oficial que se tiene por parte de Profepa es que, del 4 de noviembre al 16 de diciembre de 2019, revisó 617 mil 955 pinos importados de Estados Unidos.

Del total, regresó tres embarques con 5 mil 178 árboles de Navidad, que equivalen al 0.84 por ciento de los ejemplares inspeccionados durante esa temporada de fin de año.

 

Por Excelsior