La mañana de este jueves, un grupo de aspirantes a la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) y sus padres se manifestaron en la capital queretana, exigiendo la repetición de la prueba de admisión realizada en marzo. La protesta surge tras el descubrimiento de que 33 alumnos habían obtenido la calificación máxima de manera fraudulenta, debido a la filtración del examen por un centro de asesoramiento.
Los manifestantes se congregaron en la esquina de Prolongación Ignacio Zaragoza y avenida de Las Torres, mostrando pancartas y mantas con mensajes que exigían la anulación del examen para los alumnos que hicieron trampa y su exclusión de futuros procesos de admisión. Cada vez que el semáforo detenía el tráfico, se colocaban frente a los vehículos para hacer visibles sus demandas, retirándose cuando la circulación se reanudaba.
Entre las solicitudes de los manifestantes también figuraba la destitución e inhabilitación de los funcionarios universitarios involucrados en la filtración del examen. Además, pidieron que los próximos procesos de admisión se realicen con total transparencia. Las pancartas también mostraban apoyo al director de la Facultad de Medicina, Rodrigo Miguel González, quien había revelado públicamente la filtración del examen.
Hasta el momento, la Facultad de Medicina no ha confirmado si se repetirá el examen ni si los 33 alumnos involucrados en el fraude serán expulsados. Amadeo Lugo Pérez, secretario académico de la facultad, informó que se están realizando cambios en el examen y se incorporará un sistema informático con inteligencia artificial para prevenir futuros actos fraudulentos.
La profesora de historia y egresada de la UAQ, Marcela Luján Monroy, compartió en redes sociales una tabla comparativa de los resultados de admisión de los últimos procesos, mostrando una anomalía significativa en la cantidad de alumnos que obtuvieron la calificación máxima en el último examen, lo que reforzó las sospechas de fraude entre los aspirantes rechazados. Luján destacó que los aspirantes ya habían señalado irregularidades en abril, pero no se les había prestado atención.
Con información de: La Jornada