Un incidente inesperado en Tulsa, Oklahoma, puso de manifiesto los peligros de dejar objetos potencialmente peligrosos al alcance de las mascotas. Un perro de la familia, mientras jugaba, masticó una batería de litio que estaba sobre un colchón en el suelo. Esta acción desafortunada causó una explosión y el consiguiente incendio que devastó completamente la residencia de la familia.
Afortunadamente, no hubo víctimas humanas, pero el suceso sirvió para recordar la importancia de mantener objetos peligrosos fuera del alcance de las mascotas. El fuego, desatado por la explosión, consumió rápidamente el colchón y se extendió por toda la casa, aunque por fortuna, los dos perros y un gato de la familia lograron escapar sin daños.
La dramática escena fue capturada por una cámara de vigilancia instalada en el interior del hogar. Las imágenes, que mostraron la rápida propagación del fuego, se hicieron virales en redes sociales, provocando una oleada de reacciones y concienciación sobre la seguridad en el hogar respecto a las mascotas y los objetos potencialmente peligrosos.
Este incidente subraya la importancia de la precaución y la vigilancia constante cuando se tienen animales en casa, especialmente con elementos que pueden ser masticados o que representan un riesgo de incendio. La comunidad de Tulsa se ha movilizado para apoyar a la familia afectada y para promover mejores prácticas de seguridad en los hogares con mascotas.