Guterres señaló tres problemas críticos que afectan al planeta: la impunidad, la creciente desigualdad y la incertidumbre que generan tanto el cambio climático como la inteligencia artificial (IA) sin control.
El líder de la ONU condenó la impunidad que prevalece en los principales conflictos actuales en regiones como Gaza, Líbano, Ucrania y Sudán, destacando cómo algunos países violan la carta de la ONU y las leyes humanitarias internacionales sin rendir cuentas. “Nada puede justificar el castigo colectivo en Gaza”, afirmó, cuestionando la comunidad internacional y la situación de los palestinos sin libertad ni derechos, lo que provocó una ovación en el foro.
Sobre la desigualdad, Guterres subrayó que el problema no es solo técnico o burocrático, sino profundamente arraigado en la historia y el poder. Recordó que dos tercios de los 75 países más pobres del mundo están en peores condiciones que hace cinco años, mientras que los cinco hombres más ricos del mundo han duplicado su fortuna en el mismo período. Criticó que los gobiernos otorgan beneficios fiscales a grandes empresas y "ultrarricos", mientras descuidan la inversión en salud, educación y protección social.
En cuanto a la incertidumbre, Guterres señaló la necesidad urgente de un futuro sin combustibles fósiles, advirtiendo que la transición no será fácil. Respecto a la IA, cuestionó el poder que unas pocas empresas tienen sobre esta tecnología sin la menor supervisión y abogó por un control global para evitar lo que llamó “la Gran Fractura”.
Con información de López-Dóriga Digital.