Si usted no lo sabe porque es un fan casual de la NFL, o si lo sabe y quiere recordarlo, déjame le comento que en casi 2 décadas no se ha repetido el equipo que gana la NFC Este. A veces son los Vaqueros de Dallas, a veces las Águilas de Filadelfia, pocas veces los Gigantes de Nueva York, y casi nunca los Commanders de Washington.

Los Commanders tienen varios problemas a nivel organización, a nivel identidad y a nivel infraestructura... Han sufrido cambios sustanciales desde que los obligaron a abandonar el nombre de "Pieles Rojas," por ser un peyorativo racial, obligaron al dueño Dan Schneider a vender el equipo, no han invertido en sus instalaciones, y cada vez había menos interés por los aficionados por apoyar a un equipo que no solo carecía de nombre, si no de sustancia que les permitiera a los habitantes del Distrito Capital de Estados Unidos sentirse identificados con este equipo que en sus ayeres habría conquistado 3 Súper Tazones.

Tienen años fuera de la conversación de contendientes, y hace poco fui a un juego de trivias y casi golpeo la pared de frustración porque me olvidé por completo de su existencia en una pregunta muy sencilla... Y les aseguro que no he sido el único al que le ha pasado eso.

En esta semana 5 que está por arrancar, los Commanders tienen al equipo con la mejor ofensiva de la liga. Casi no han necesitado a sus pateadores porque son extremadamente efectivos. Cómo los Empacadores de Green Bay de 2011 y los Broncos de Denver de 2013 pueden darse el lujo de permitir más de 30 puntos por partido porque anotan más de 35. El mantra de los Commanders es "seguir anotando" y lo han hecho con creces y de una manera tan convincente que una vez más están atrayendo al público que tanto les hacía falta en las gradas.

Quizá sea por el mariscal novato Jayden Daniels, o tal vez la nueva administración ha llegado a poner un orden que no se había visto en años, pero la realidad es que el equipo capitalino está en la cima de la NFC Este y se encuentra intentando mantener esa constante de un que equipo diferente la gane cada año.

Es refrescante ver a un equipo tan olvidado resurgir de entre las cenizas porque también mantiene viva la constante de que cada año la NFL presenta equipos diferentes en las finales, y también tranquiliza ver como un novato sin la presión de levantar a todo un equipo, ha demostrado que es el diamante en bruto de esta generación de talentos jóvenes.

En verdad le deseo lo mejor a los Commanders. Y entre esas cosas evalúen dos cosas: buscar integrar al mejor receptor de la liga, Davante Adams, que ya busca su salida de los Raiders de Las Vegas; y que tal vez regresar al branding de Pieles Rojas no es la mejor idea del mundo... Aunque no suena descabellado porque empezaron a ganar una vez que el tema se puso sobre la mesa. Tal vez sea su amuleto...