Por Redacción Contra Réplica

Legisladores estadounidenses buscan detener plan para sacrificar 450,000 búhos barrados

Un grupo de 19 legisladores se opone al plan del Servicio Federal de Pesca y Vida Silvestre para sacrificar búhos barrados, argumentando que es costoso y poco ético, a pesar de que busca proteger al búho moteado en peligro de extinción.

Un grupo de 19 legisladores estadounidenses, encabezados por Sydney Kamlager-Dove (demócrata por California) y Troy Nehls (republicano por Texas), busca detener un controvertido plan del Servicio Federal de Pesca y Vida Silvestre (FWS) para sacrificar a más de 450,000 búhos barrados. El objetivo del plan es proteger al búho moteado, una especie en peligro de extinción, pero los legisladores argumentan que el costo y la ética del proyecto son cuestionables.

El plan, aprobado el año pasado, propone contratar a tiradores expertos para cazar búhos barrados durante 30 años en un área de aproximadamente 23,000 millas cuadradas en California, Oregón y Washington. Los búhos barrados, nativos de América del Norte pero invasores en la Costa Oeste desde la década de 1970, han desplazado significativamente a los búhos moteados, que requieren territorios más grandes para reproducirse. Actualmente, se estima que hay alrededor de 100,000 búhos barrados en algunas zonas, frente a solo 7,000 búhos moteados.

En una carta enviada a Doug Burgum, secretario del Interior, los legisladores criticaron el alto costo del plan, que podría superar los $1,300 millones de dólares si se extrapolan los gastos de una subvención otorgada a la tribu indígena del valle Hoopa en California para eliminar hasta 1,500 aves. “Este es un uso inadecuado e ineficiente del dinero de los contribuyentes estadounidenses. El plan es un ejemplo de cómo nuestro gobierno federal intenta suplantar a la naturaleza y controlar los resultados ambientales a un alto costo”, señalaron.

El FWS argumenta que la eliminación de búhos barrados es necesaria para evitar la extinción del búho moteado. El año pasado, un grupo de investigadores eliminó a cerca de 4,500 búhos barrados en la Costa Oeste. Sin embargo, el plan a largo plazo busca aumentar gradualmente el número de aves sacrificadas, con el objetivo de alcanzar 15,500 anuales a partir de 2027.

Mientras los legisladores buscan detener el plan, el debate continúa sobre cómo equilibrar la conservación de especies en peligro de extinción con los costos económicos y las consideraciones éticas de sacrificar una especie para salvar a otra.