Por Cindy Palencia

Zuckerberg regresa a los tribunales por acusaciones de monopolio en Meta

El CEO de Meta enfrenta un juicio crucial sobre las adquisiciones de Instagram y WhatsApp, con posibles consecuencias serias para el futuro de su imperio de redes sociales.

Mark Zuckerberg volvió a comparecer en los tribunales de Washington para defender a su empresa, Meta, en el juicio antimonopolio iniciado por la Comisión Federal de Comercio (FTC). El caso, que se remonta a hace más de cinco años, cuestiona las adquisiciones de Instagram y WhatsApp por parte de Facebook, argumentando que estas compras eliminaron competidores y perjudicaron la competencia en el mercado de redes sociales. En sus declaraciones iniciales, Zuckerberg destacó cómo surgió Facebook, mientras que su defensa resalta que estas adquisiciones beneficiaron a los consumidores, al mejorar los servicios ofrecidos.

El juicio tiene lugar en un contexto de tensiones crecientes entre el gobierno de Estados Unidos y las grandes tecnológicas. A pesar de sus esfuerzos por evitar el proceso judicial, Zuckerberg se enfrenta a las consecuencias de una denuncia que apunta a que Meta usó su posición dominante para eliminar a posibles rivales y consolidarse como el líder indiscutido en el mercado. Si el veredicto no favorece a Meta, la compañía podría verse obligada a vender Instagram y WhatsApp, dos de sus aplicaciones más populares.

La FTC ha argumentado que las compras de Instagram en 2012 por 1.000 millones de dólares y de WhatsApp en 2014 por 19.000 millones de dólares fueron tácticas estratégicas para sofocar a la competencia. La agencia afirma que al integrar estos servicios bajo el mismo paraguas corporativo, Meta eliminó amenazas directas a su dominio en las redes sociales. Sin embargo, los abogados de Meta sostienen que las adquisiciones fueron beneficiosas para los usuarios, señalando el éxito de estas plataformas y su constante innovación.

Uno de los puntos clave del juicio es la definición del "mercado relevante", ya que la FTC sostiene que las redes sociales de Meta caen dentro del segmento de "redes sociales personales", excluyendo a competidores como TikTok y YouTube. Por otro lado, Meta argumenta que hay una competencia continua entre sus servicios y los de otras plataformas. A medida que el juicio avanza, se prevé que se profundice en la cuestión de si Meta ha degradado la experiencia de los usuarios en sus plataformas, al imponer demasiados anuncios y realizar cambios bruscos en sus funciones.