Un centro médico en la ciudad de Beersheva, al sur de Israel, fue alcanzado directamente por un misil lanzado desde Irán en la madrugada del viernes, provocando un incendio y daños importantes en la estructura, según confirmaron los bomberos locales. Afortunadamente, no se reportaron heridos dentro del hospital, ya que el personal se encontraba resguardado en zonas seguras al momento del ataque.
El impacto generó una densa columna de humo visible a varios kilómetros y afectó severamente la fachada del edificio, el cual tiene más de cuatro pisos, además de causar la rotura de ventanas y daños internos en múltiples áreas. Vehículos estacionados en las inmediaciones también resultaron afectados por el fuego desatado tras la explosión.
Simultáneamente, otras localidades como Tel Aviv y Holón experimentaron ataques con misiles, dejando varios heridos de diversa gravedad. En Holón, al menos tres personas resultaron con lesiones graves, mientras que otras sufrieron heridas moderadas y leves, según los servicios de emergencia israelíes.
Las autoridades continúan trabajando en la búsqueda y rescate de posibles personas atrapadas entre los escombros, a la vez que mantienen activas las medidas de protección para minimizar el riesgo a la población en medio de este aumento en la violencia regional.