La detención de Narciso Barranco, un mexicano que ha vivido en Estados Unidos por más de tres décadas y padre de tres miembros activos del ejército estadounidense, ha causado gran malestar en la comunidad hispana de California. El arresto, registrado en video, muestra el uso excesivo de la fuerza por parte de agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), lo que ha generado una fuerte condena pública.
Barranco, quien se desempeña como jardinero y no tiene antecedentes penales, fue sometido con gas pimienta y recibió golpes durante su aprehensión frente a una cafetería en Santa Ana. El incidente ha vuelto a poner en debate las prácticas del ICE en la región, donde muchas familias migrantes viven en constante temor por posibles operativos.
El Consulado de México en Los Ángeles ha solicitado información oficial al ICE sobre el caso y ha mantenido contacto directo con Barranco en el centro de detención donde permanece recluido. Además, se gestionó atención médica urgente, luego de que familiares informaran sobre una posible dislocación en su hombro a causa del trato recibido.
El caso de Barranco no es aislado; refleja una tendencia de incremento en las redadas migratorias durante la administración actual, que ha detenido a miles de mexicanos en los últimos meses. Por su parte, sus hijos, todos en servicio militar, exigen respeto y justicia para su padre, mientras las autoridades mexicanas siguen ofreciendo apoyo legal y consular.