En el entorno digital actual, las redes sociales se han convertido en canales clave para que las empresas de telecomunicaciones promocionen sus servicios, como telefonía móvil, internet y televisión de paga. Estas plataformas permiten a las compañías llegar a públicos específicos mediante anuncios pagados o perfiles interactivos, con la intención de aumentar sus ventas y consolidar su presencia en el mercado.
El celular es el dispositivo principal para acceder a redes como WhatsApp, Instagram, Facebook y TikTok, donde los usuarios son frecuentemente expuestos a mensajes que prometen beneficios como “más gigas al mismo precio” o “la mejor conexión en todo México”. Sin embargo, estos anuncios pueden contener información exagerada, parcial o incluso falsa, que puede inducir a error a los consumidores.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) advierte que la publicidad engañosa puede presentarse de diversas maneras: desde ofertas inexistentes hasta términos ocultos o exageraciones sobre las capacidades reales del servicio. Por ello, recomienda leer cuidadosamente los contratos y verificar que los términos y condiciones sean claros y precisos, incluyendo el precio total, duración de promociones y cualquier restricción aplicable.
Además, Profeco señala que nadie debe sentirse presionado a contratar un servicio si la publicidad genera dudas o no es transparente. La recomendación es exigir claridad y evitar comprometerse sin información completa, para proteger el derecho de los consumidores y evitar sorpresas desagradables en el uso de los servicios contratados.