Este diagnóstico ofrece una nueva explicación sobre los dolores crónicos que Kahlo sufrió durante gran parte de su vida, atribuidos en su mayoría a las secuelas de un grave accidente de tráfico.
Kahlo, quien contrajo polio en su infancia, sufrió un accidente de autobús a los 18 años que le provocó múltiples fracturas, dislocaciones y una lesión en la columna vertebral. Aunque su historial médico apuntaba a diversas afecciones, como espina bífida y postpolio, los investigadores han determinado que la SCC, una lesión de las raíces nerviosas en la parte inferior de la médula espinal, es la que mejor explica los síntomas que la artista padeció, incluyendo el dolor neuropático en las piernas y genitales, así como la pérdida de sensibilidad.
El estudio, publicado en el Journal of Neurology, se basó en los informes médicos de Kahlo y concluyó que los tratamientos a los que fue sometida, como el uso de corsés ortopédicos, no eran los más adecuados y podrían haber empeorado su estado. Según la neuróloga Hatice Kumru, autora principal de la investigación, el síndrome de cola de caballo es una afección rara, pero su identificación en pacientes históricos como Frida Kahlo ayuda a comprender mejor la gravedad de sus síntomas y el impacto en su vida y obra.
El nuevo diagnóstico también rechaza la hipótesis de que Kahlo sufriera de espina bífida o síndrome postpolio, ya que no presentó síntomas compatibles antes del accidente que cambió su vida.
Con información de López-Dóriga Digital.