La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo expresó su pesar por el asesinato del sacerdote y defensor de los derechos humanos, Marcelo Pérez Pérez, ocurrido el pasado domingo en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. Durante su conferencia matutina desde Palacio Nacional, Sheinbaum informó que las autoridades ya iniciaron las investigaciones correspondientes para esclarecer el crimen y garantizar que no quede impune.

“Lamentamos profundamente el asesinato del padre Marcelo Pérez Pérez. Se están llevando a cabo las investigaciones necesarias”, aseguró la presidenta. Añadió que la secretaria de Gobernación se encuentra en constante comunicación con el gobierno estatal, la Diócesis y las autoridades eclesiásticas para coordinar esfuerzos en torno a la investigación.

El sacerdote Marcelo Pérez, originario del pueblo tzotzil y reconocido defensor de los pueblos originarios, fue asesinado a balazos mientras se encontraba en el interior de su camioneta, en el barrio de Cuxtitali de San Cristóbal de Las Casas. El padre Marcelo, quien acababa de salir de la parroquia de Cuxtitali tras oficiar una misa, fue atacado por dos individuos a bordo de una motocicleta, quienes le dispararon a quemarropa en al menos dos ocasiones.

Vecinos del lugar intentaron auxiliarlo solicitando la intervención de los cuerpos de seguridad, pero las heridas resultaron ser mortales, y el sacerdote falleció en el sitio del ataque.

La Fiscalía General del Estado de Chiapas, a través de la Fiscalía de Asuntos Especiales y el Distrito Altos, ya ha iniciado la investigación correspondiente para dar con los responsables del asesinato. Las autoridades han declarado que no descansarán hasta esclarecer este crimen que ha conmocionado a la comunidad local y a la nación.

El padre Marcelo Pérez era ampliamente conocido por su labor como defensor de los derechos humanos y su compromiso con las comunidades indígenas de Chiapas. Apenas el pasado 13 de septiembre, participó en la ‘Marcha por la Paz’ en Tuxtla Gutiérrez, donde más de 20,000 personas alzaron la voz para exigir un alto a la violencia en el estado.

México enfrenta una grave situación en materia de derechos humanos, siendo el segundo país en Latinoamérica con mayor número de defensores asesinados en 2023, con 30 casos registrados, de acuerdo con la organización internacional ‘Front Line Defenders’. Este crimen ha generado indignación y llamado la atención sobre la inseguridad que viven quienes luchan por la paz y la justicia en el país.

Las autoridades han hecho un llamado a la calma y prometido una investigación a fondo para llevar a los responsables ante la justicia. Mientras tanto, la comunidad católica y defensores de derechos humanos continúan exigiendo acciones contundentes que pongan fin a la violencia en la región.