Por Redacción Contra Réplica

Astrid Rondero y Fernanda Valadez dedican premio a huérfanos

Astrid Rondero y Fernanda Valadez fueron reconocidas a Mejor Dirección, Mejor Largometraje Mexicano y Mejor Guion por su cinta sobre un joven haciéndose hombre en un país maravilloso y, a la vez, terrible.

Tal como lo hicieron hace cuatro años, cuando se alzaron con el Premio a Mejor Largometraje por Sin señas particulares, las directoras Astrid Rondero y Fernanda Valadez volvieron a subir ayer al estrado del Teatro Melchor Ocampo en el marco de la edición 22 del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) para festejar que su más reciente filme Sujo fue votado por el jurado del certamen, liderado por el cineasta Alexander Payne, como el Mejor Largometraje Mexicano, la Mejor Dirección y el premio a Mejor Guion.

“Esta película está dirigida para los huérfanos de este país, que esperemos tengan un futuro distinto. Sujo es la historia de un joven haciéndose hombre en este país que todos sabemos que es tan maravilloso como es terrible a la vez. Para Fernanda y para mí ver nuestra realidad a través de los ojos de este hombre joven ha sido el mayor regalo que hemos recibido y ha sido una gran aventura. Nadie debería estar determinado a la violencia”, expresó Astrid Rondero.

Sujo, producido por Nicolás Celis y que fue elegido por la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC) para representar a México en la carrera del Oscar y del premio Goya, es una mirada esperanzadora hacia todos esos niños que quedaron huérfanos por las afectaciones colaterales del crimen organizado. Cabe destacar que el filme llegará a la cartelera comercial este 31 de octubre. 

La cocina, de Alonso Ruizpalacios, obtuvo el Premio del Público a Mejor Largometraje Mexicano de Ficción, mientras que el filme de fantasía y terror Un cuento de pescadores, de Edgar Nito, obtuvo una Mención Especial.

La actriz española Lola Dueñas llamó a Laura Diana Di de la cinta Violentas mariposas y a Andrés Revo de Hombres íntegros para entregarles los premios a Mejor Actriz y Actor de un Largometraje Mexicano de Ficción.

“Gracias a mi madre, a mi hermano, a mi padre, a mi equipo y a nuestra comunidad queer. Dedico este momento a las personas que diariamente se sienten perseguidas por los trastornos alimenticios y las adicciones, a todas las vidas que son arrebatadas por una guerra que no les da la oportunidad de seguir adelante con sus vidas”, relató Diana Laura Di, quien también le dedicó su premio al realizador Adolfo Dávila.

Revo dedicó su premio a las víctimas de la violencia. “Me encantaría dedicar este premio a todas las víctimas de la violencia machista de las que se habla en la película, a las mujeres principalmente, a las personas de diversidad y también a los hombres a quienes exigimos como sociedad este tipo de masculinidades”.

El jurado le otorgó el Ojo a Mejor Largometraje Documental a Morí (Li Cham) de la joven tzotzil Ana Ts’ uyeb. La mención especial dentro de esta categoría fue para La falla, de Alana Simones.

El Premio del Público a Mejor Documental fue para Goodbye horses: The Many Lives of Q Lazzarus, de Eva Aridjis. La presea a Mejor Documental dirigido por una Mujer, otorgado por la Asociación de Mujeres en Cine y Televisión, fue para Formas de atravesar el territorio, de Gabriela Domínguez Ruvalcaba

En el rubro de cortometrajes, el Ojo a Mejor Cortometraje de Ficción Mexicano fue para Spírtium, de Adolfo Margulis, que se centra en la experiencia que tuvo el director al haber sido internado en una clínica de rehabilitación.

Niño halcón duerme entre visiones de un incendio, de Mauricio Sáenz-Cánovas, ganó el Premio Especial del Jurado.

El Mejor Cortometraje Documental Mexicano fue para Buscando un burro, de Juan Vicente Manrique, y el Mejor Cortometraje Animado fue para La mancha negra, de Yareni Velázquez Mendoza. En la Sección Michoacana de Cortos los ganadores fueron Impronta, de Rafael Martínez García, quien ganó a Mejor Cortometraje, y Guion fue para Antesala al primer beso, de Adrián González Camargo.