La Cámara de Diputados guardó un minuto de silencio en memoria de los 17 menores que fallecieron debido a un brote de Klebsiella oxytoca en hospitales de México. Entre las víctimas, 16 eran recién nacidos prematuros y uno un adolescente de 14 años, según informó el titular de la Secretaría de Salud Federal, David Kershenobich.
Los casos se distribuyeron en el Estado de México, Michoacán y Guanajuato, siendo el primero el más afectado con 15 contagios y 13 muertes. En Michoacán, se registraron nueve casos con tres fallecimientos, mientras que en Guanajuato se reportaron seis casos y un deceso.
El diputado Éctor Jaime Ramírez Barba, del PAN, pidió una investigación exhaustiva para evitar la impunidad y garantizar que haya recursos suficientes para la vigilancia epidemiológica. Subrayó la importancia de abordar la resistencia bacteriana como un problema crítico de salud pública y destacó la necesidad de una detección oportuna para prevenir tragedias similares.
Este caso ha puesto en evidencia la urgencia de fortalecer la vigilancia sanitaria y la disponibilidad de medicamentos esenciales en hospitales para evitar más pérdidas humanas. La Cámara espera que las autoridades tomen medidas inmediatas para garantizar la seguridad de los pacientes más vulnerables.