El gobierno británico anunció un programa de compensación para veteranos militares que fueron dados de baja o discriminados debido a su orientación sexual o identidad de género. El esfuerzo, que forma parte de una medida para rectificar el trato histórico hacia los veteranos LGBT, asigna un total de 75 millones de libras para reparar el daño causado a quienes fueron despedidos o investigados injustamente.

Antes del año 2000, las fuerzas armadas británicas consideraban a los individuos homosexuales, lesbianas o trans como no aptos para el servicio militar. Muchos fueron obligados a dejar el Ejército y enfrentaron brutales investigaciones debido a denuncias relacionadas con su orientación sexual. En este sentido, el secretario de Defensa, John Healey, calificó el trato histórico a los veteranos LGBT como “una mancha moral en nuestra nación”.

Healey agregó que el gobierno británico busca corregir estos errores y reconocer el sufrimiento que muchos veteranos experimentaron como consecuencia de las políticas de exclusión. La compensación financiará hasta 50 mil libras para aquellos que fueron despedidos y hasta 20 mil libras adicionales para quienes enfrentaron efectos negativos relacionados con las prácticas discriminatorias.

El anuncio es una respuesta a las recomendaciones de una revisión independiente, aceptada por el exprimer ministro Rishi Sunak el año pasado, en la que se recomendaba una compensación financiera para quienes sufrieron estas prácticas. Sin embargo, algunos grupos de defensores consideran que las cantidades asignadas no son suficientes para reparar el daño.

Craig Jones, fundador de la organización benéfica Fighting with Pride, señaló que las compensaciones son bajas en comparación con el trauma y el estigma que enfrentaron muchos veteranos.

“En mis años de servicio vi a muchos de mis compañeros ser apartados por la Rama de Investigación Especial de la Policía Militar Real, y vi que eso sucedía con gran tristeza”, explicó Jones. “Tuve la suerte de no ser atrapado, pero ha sido un privilegio y un honor volver, como hacemos en las fuerzas armadas, y encontrar a aquellos que no han tenido tanta suerte y apoyarlos”.

El programa de compensación busca reparar no solo el daño financiero sino también el estigma histórico y social que persiste en los veteranos afectados, marcando un paso significativo para la igualdad y la reparación de injusticias.

Con información de Proceso.