Lo que debía ser una alegre tarde navideña en Aguascalientes se convirtió en un caos cuando dos de los personajes más queridos de la temporada, Santa Claus y el Grinch, se enfrascaron en una pelea física que dejó a todos los presentes atónitos. El enfrentamiento, que ocurrió en el Centro Histórico de la ciudad, sorprendió a familias enteras, incluidos muchos niños, que se encontraban disfrutando de las festividades.

El conflicto comenzó aparentemente por una disputa sobre las propinas que los transeúntes dejaban a ambos personajes. Según los testigos, las palabras subieron de tono, dando paso a un violento altercado en el que los empujones se convirtieron rápidamente en patadas y puñetazos. En el clímax de la pelea, Santa Claus terminó sangrando, mientras el Grinch no dejaba de discutir. Un testigo, quien grabó parte de la escena, relató: “Se enojaron porque a uno le pusieron más dinero que al otro. Y vean, ya está el pedo, ya está sangrando el Santa Claus”.

El incidente rápidamente generó el caos en la zona. Afortunadamente, la intervención de la Policía Municipal de Aguascalientes evitó que la situación escalara aún más. Los agentes detuvieron a ambos personajes por alterar el orden público. A pesar de ser escoltados hacia el Ministerio Público, Santa Claus y el Grinch continuaron con su disputa, lo que incrementó la tensión entre los curiosos que se habían reunido alrededor.

En cuestión de minutos, las imágenes y videos del altercado comenzaron a circular en las redes sociales, generando una avalancha de reacciones. Los internautas no tardaron en expresar su sorpresa y humor ante lo sucedido, con comentarios como “Mi México mágico” o “Cosas que solo pasan en México”, mientras que otros no perdieron la oportunidad de destacar lo irónico del incidente, con el Grinch, el eterno villano de la Navidad, cumpliendo su rol en la vida real.

La imagen de un sangrante Santa Claus fue especialmente impactante. Las familias, algunas de las cuales habían acudido al centro de la ciudad para disfrutar de la Navidad, no podían creer lo que sucedía ante sus ojos. Algunos padres expresaron su desconcierto al intentar explicar a sus hijos lo que estaba ocurriendo. “No es posible que estén peleando así. Nosotros venimos con los niños a disfrutar de la Navidad y nos encontramos con esto”, comentó un padre de familia, visiblemente molesto.

Este insólito incidente, aunque de carácter cómico para muchos, dejó en evidencia los retos que pueden surgir cuando el espíritu navideño se ve trastocado por la violencia. En un contexto donde las festividades deberían promover la unión y la paz, la pelea entre Santa Claus y el Grinch recordó a todos que, a veces, incluso los personajes más simbólicos pueden perder de vista el verdadero significado de la temporada.