El mundo del K-pop y la música R&B de Corea del Sur está de luto tras la repentina muerte de Wheesung, uno de los vocalistas más influyentes de su generación. El artista, cuyo nombre real era Choi Whee-sung, fue hallado sin vida en su apartamento en Gwangjin-gu, Seúl, el lunes 10 de marzo a los 43 años. La causa exacta de su muerte aún está siendo investigada, aunque las autoridades no encontraron signos de violencia en el lugar.

Wheesung fue encontrado inconsciente por su madre y, a pesar de los esfuerzos de los servicios de emergencia, ya no tenía signos vitales al momento de su llegada. La agencia Tajo Entertainment, que representaba al cantante, confirmó la triste noticia, indicando que había fallecido debido a un paro cardíaco. La familia del cantante decidió cancelar el funeral público debido al profundo shock por su partida, optando por una cremación privada.

La noticia de su fallecimiento ha causado una profunda conmoción en la industria musical surcoreana. Artistas de diferentes géneros, incluidos raperos y cantantes que compartieron escenarios con Wheesung, han expresado su dolor y homenaje a través de redes sociales. El rapero Changmo dedicó un mensaje agradeciendo a Wheesung por su música, mientras que el rapero Paloalto recordó la influencia que el artista tuvo en su propia carrera. Otros como Yoon Min-soo y Hangzoo también rindieron tributo al cantante, resaltando su corazón amable y su talento único.

Wheesung debutó en 1999 como parte del grupo A4, pero fue su carrera en solitario, iniciada en 2002, la que lo consolidó como una de las voces más destacadas del R&B surcoreano. Su sencillo "Can’t We?" lo catapultó a la fama, y a lo largo de su carrera lanzó varios éxitos como "With Me", "Insomnia" y "Even Thought of Marriage". Además de su trabajo como cantante, Wheesung fue un prolífico compositor y productor que contribuyó al éxito de otros artistas como Younha, G.NA, T-ara y Ailee. También fue responsable de varios temas para dramas coreanos, lo que consolidó su posición en la industria musical.

A pesar de su éxito, Wheesung enfrentó serias dificultades personales. Fue diagnosticado con depresión crónica desde 2005 y luchó con problemas de salud mental y abuso de sustancias, lo que generó preocupación pública. En 2019, fue acusado de consumo ilegal de propofol, lo que resultó en una sentencia de prisión suspendida. En 2020, fue encontrado inconsciente debido al uso de etomidato, otro anestésico, lo que evidenció las dificultades por las que atravesaba en ese momento. Su agencia explicó que el cantante estaba atravesando un periodo muy difícil debido a la pérdida de su padre y otros amigos cercanos.

La partida de Wheesung deja una huella profunda en la música surcoreana, y su legado como artista sigue vivo en las canciones que creó y en las vidas que tocó a través de su música.