El Papa Francisco, a pesar de su estado de salud delicado debido a problemas respiratorios, ha cumplido con su tradicional visita a los reclusos de la cárcel de Regina Coeli en el centro de Roma. La visita ocurrió en la tarde de Jueves Santo, como parte de los rituales de Semana Santa que el pontífice ha realizado durante años para acercarse a los más necesitados. Este gesto, que refleja su compromiso con los más vulnerables, se realizó con una breve intervención del Papa, quien mostró su apoyo y cercanía a los internos.
A pesar de las recomendaciones médicas debido a su convalecencia, el Papa Francisco no quiso faltar a este momento de solidaridad con los prisioneros, continuando con la tradición que ha marcado su pontificado. Durante su visita, el Papa compartió palabras de aliento y esperanza, alentando a los internos a mantener su fe y su esperanza en momentos difíciles.
El Papa ha sido conocido por su enfoque pastoral hacia aquellos que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad, y esta visita no fue la excepción. A lo largo de los años, ha hecho visitas similares a otras instituciones penitenciarias, llevando un mensaje de compasión y perdón.
A pesar de los desafíos que enfrenta por su salud, la presencia del Papa en Regina Coeli fue un acto significativo, recordando a todos la importancia de la solidaridad y el acompañamiento, incluso en medio de las pruebas personales.