México logró una reducción clave en los aranceles que pagan sus automóviles exportados a Estados Unidos, los cuales pasarán del 25 % al 15 %, según informó el secretario de Economía, Marcelo Ebrard. Esta medida fue establecida en la Proclamación 10908 y representa un avance en la defensa de la industria automotriz nacional ante los desafíos del entorno comercial.
Durante una conferencia, Ebrard destacó que si bien no se logró la exención total del impuesto, el ajuste representa una mejora del 40 % respecto a la tarifa original. La reducción aplicará únicamente a vehículos producidos en México, lo que beneficiará directamente a las plantas ensambladoras instaladas en el país.
El funcionario también reveló que se analiza la posibilidad de aplicar la medida de forma retroactiva, lo cual permitiría a las empresas recuperar parte de los pagos realizados desde abril. Además, se aceptó que el contenido de origen incluya autopartes ensambladas en Estados Unidos, facilitando el cumplimiento de las reglas del T-MEC.
Este nuevo esquema fortalece la posición de México como socio estratégico en América del Norte, especialmente frente a otras naciones exportadoras que continúan enfrentando tarifas más altas. La decisión también brinda certidumbre a las inversiones y mejora el entorno de negocios en el sector automotriz regional.