Durante los años 2023 y 2024, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador destinó más de 387 millones de pesos (aproximadamente 22 millones de dólares) para financiar la impresión de 15 millones de libros de texto escolares enviados a Cuba, según reveló una investigación de Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).
La producción fue coordinada por la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos (Conaliteg), en conjunto con la Secretaría de Relaciones Exteriores, y se realizó a través de la empresa estatal IEPSA. Los ejemplares fueron distribuidos en todos los niveles educativos del sistema cubano, desde la Primera Infancia hasta el nivel Preuniversitario.
De acuerdo con la investigación, la ayuda se justificó con argumentos de tipo humanitario, pese a que, en México, aumentó la falta de medicamentos y se duplicó la población sin acceso a servicios de salud, según datos del extinto Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), desaparecido en 2024.
Los libros incluyen contenidos críticos hacia Estados Unidos, con señalamientos al expresidente Donald Trump por presuntas acciones hostiles contra Cuba. Esto ha generado preocupación en organismos internacionales como el Observatorio de Libertad Académica, cuya investigadora Omara Ruiz Urquiola denunció que el financiamiento mexicano respalda materiales con alta carga de “control ideológico”.
Los contratos firmados por Conaliteg en 2023 y 2024 con IEPSA detallan tirajes de 5.2 y 9.6 millones de libros respectivamente. El valor aduanal declarado fue simbólico, inferior a un centavo de dólar por libro, pese a que el costo de producción se estimó en 24 pesos por ejemplar.
El gobierno cubano solicitó formalmente este apoyo mediante la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID), argumentando falta de recursos materiales y tecnológicos.
Hasta el momento, ni la SEP ni la SRE han respondido a las solicitudes de información sobre la justificación y destino de los recursos.