Por Redacción Contra Réplica

Los túneles secretos de Bellas Artes: mito urbano o realidad subterránea

Trabajadores, cronistas e investigaciones históricas sostienen que bajo el Palacio de Bellas Artes podrían existir pasajes sellados que conectan con otros edificios del Centro Histórico.

Entre mármoles y vitrales, el Palacio de Bellas Artes guarda más que arte: esconde una historia subterránea envuelta en misterio. Desde hace décadas, diversas versiones apuntan a la existencia de túneles secretos bajo el recinto, usados supuestamente con fines políticos, militares o como rutas discretas entre edificios históricos del Centro.

Los rumores señalan que estos pasadizos habrían sido construidos durante el Porfiriato o incluso en épocas virreinales. Algunos planos antiguos, resguardados en el Archivo General de la Nación, sugieren la presencia de estructuras subterráneas que conectarían Bellas Artes con sitios como el Palacio Nacional o el antiguo Colegio de San Ildefonso.

Investigaciones del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) documentan que, durante restauraciones y obras del Metro, se hallaron estructuras abovedadas y túneles colapsados cerca del recinto. Aunque muchos fueron sellados por seguridad, quedaron registrados oficialmente, lo que refuerza la posibilidad de accesos ocultos.

Trabajadores de mantenimiento y restauradores del recinto han mencionado en entrevistas la presencia de habitaciones cerradas o zonas restringidas desde las que, aseguran, se puede acceder a pasajes sellados. Aunque ninguna autoridad lo ha confirmado, el silencio institucional ha alimentado el mito por generaciones.

Expertos señalan que este tipo de túneles no eran extraños en la Ciudad de México virreinal, donde se usaban para el drenaje, el traslado de mercancías o como rutas privadas entre conventos, iglesias y edificios gubernamentales.

Hoy, ningún acceso es visible al público, pero el mito persiste. Ya sea como reliquia del pasado o como simple rumor urbano, los túneles de Bellas Artes siguen despertando la curiosidad de quienes, bajo sus muros, sospechan que aún hay secretos por descubrir.