Por Cindy Palencia

Trump insiste en la anexión de Canadá durante las elecciones parlamentarias

El presidente de EE.UU. desafía los protocolos diplomáticos y propone la incorporación de Canadá como estado

En una nueva provocación que ha causado revuelo en la arena internacional, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a insistir en la idea de anexar a Canadá a su nación, justo en el día en que los canadienses se dirigían a las urnas para elegir su Parlamento. Esta intervención política, una vez más, rompió los protocolos diplomáticos, generando reacciones tanto dentro como fuera de Canadá.

A través de un mensaje publicado en su red social, Truth Social, Trump promovió la idea de que Canadá debería convertirse en el "querido 51 estado de los Estados Unidos de América", haciendo alusión a un proyecto que ha mencionado en varias ocasiones desde que asumió la presidencia. En su mensaje, Trump elogió a un candidato canadiense, destacando su visión para reducir impuestos, fortalecer el poder militar y expandir sectores clave de la economía como los automóviles, acero, aluminio, madera y energía, mientras aseguraba que EE.UU. ya no podría seguir subsidiando a Canadá con grandes sumas de dinero.

"Canadá tiene que convertirse en el querido 51 estado de los Estados Unidos de América", reiteró Trump, olvidando las implicaciones que esta afirmación tiene en la soberanía de la nación vecina. Este comentario no solo generó controversia en el ámbito político, sino que también fue considerado una injerencia inapropiada en el proceso democrático canadiense, justo en el día de sus elecciones parlamentarias.

Trump, quien ha sido conocido por sus políticas de nacionalismo económico, también ha mostrado interés en utilizar la "fuerza económica" de EE.UU. como herramienta para fortalecer su postura. Durante su mandato, impuso aranceles a productos canadienses, incluyendo acero, aluminio y energía, lo que fue percibido por el gobierno canadiense como una violación del tratado de libre comercio T-MEC y como un ataque a la economía del país vecino.

Esta no es la primera vez que Trump se pronuncia sobre la anexión de Canadá. A lo largo de su presidencia, ha dejado claro su deseo de llevar a cabo una unión política entre ambos países, aunque sus declaraciones han sido recibidas con desconfianza y rechazo tanto dentro de Canadá como a nivel internacional. La tensión entre los dos países se intensificó durante la guerra comercial y continúa siendo un tema sensible para los líderes canadienses, quienes han manifestado su rechazo ante cualquier intento de injerencia en sus asuntos internos.