Por Redacción Contra Réplica

Jóvenes maasai preservan su cultura a través de un histórico campamento de guerreros

Cerca de 900 adolescentes se entrenan en Kenia para convertirse en líderes, mientras adaptan sus tradiciones a los retos del presente.

En las tierras boscosas de Maasailand, Kenia, unos 900 adolescentes maasai se reunieron en un campamento tradicional que ocurre solo cada 10 a 15 años, donde fueron instruidos en valores culturales, habilidades de liderazgo y resiliencia. Vestidos con mantas tradicionales llamadas shukhas, los jóvenes soportaron el frío, el hambre y la falta de comodidades modernas como parte de su aprendizaje para convertirse en guerreros maasai, una tradición que, aunque adaptada, sigue vigente.

El rito de paso conocido como Enkipaata ha cambiado con el tiempo. Antes, los jóvenes pasaban un año completo en aislamiento, aprendiendo a sobrevivir en la naturaleza e incluso cazando leones. Hoy, la formación se ha reducido a un mes y ha eliminado prácticas como la caza, enfocándose en principios como la disciplina, el compañerismo y el respeto por la educación, como destacó Joyce Naingisa, ministra del condado de Narok Norte, quien subrayó la importancia de que los adolescentes continúen sus estudios tras completar el rito.

Las mujeres, como Naingisa, desempeñan un papel fundamental en este proceso, construyendo los refugios temporales para los jóvenes y asumiendo la responsabilidad de su cuidado colectivo. El espíritu de hermandad se refuerza con la ceremonia de graduación, donde se sacrifica un toro y se comparte la carne entre todos, enseñándoles valores de unidad y cooperación.

Sin embargo, los nuevos guerreros maasai enfrentarán desafíos distintos a los de sus ancestros: el cambio climático y la pérdida de tierras tradicionales debido a la expansión urbana y agrícola. Autoridades culturales y comunitarias, como Mosinte Nkoitiko, señalaron que esta generación será clave para enfrentar estos retos, plantando no solo nuevas raíces culturales, sino también árboles que crecerán junto con ellos como símbolo de esperanza para el futuro.