Lando Norris y McLaren afrontan con optimismo el Gran Premio de China, una carrera clave en la temporada 2025 de la Fórmula 1. Después de su triunfo en Australia, el británico y su equipo se perfilan como los principales contendientes al título, desplazando del protagonismo a Red Bull. La competencia en Shanghái incluirá la primera carrera esprint del año, lo que agrega un atractivo extra con puntos adicionales en juego.
El circuito de Shanghái, con sus 5.451 kilómetros y exigentes zonas de frenado, será un desafío para los pilotos, especialmente por las condiciones climáticas, que se prevén bochornosas. La adaptación será clave, ya que los equipos solo dispondrán de una sesión de entrenamientos oficiales de 60 minutos antes de la clasificación para la esprint, programada para el viernes por la tarde. La carrera corta del sábado, de 19 vueltas, definirá un orden de salida distinto al del Gran Premio del domingo, lo que podría generar sorpresas.
Tras su inesperado segundo lugar en Melbourne, Max Verstappen ha reconocido que Red Bull no atraviesa su mejor momento y que McLaren ha tomado la delantera en rendimiento. Ferrari, por su parte, dejó dudas en Australia, con Lewis Hamilton terminando décimo en su debut con la escudería italiana y Charles Leclerc apenas octavo. Mercedes, en cambio, mostró signos de recuperación con George Russell en el podio y el joven Andrea Kimi Antonelli logrando un meritorio cuarto puesto en su estreno en la categoría.
Carlos Sainz y Fernando Alonso, quienes no lograron terminar la carrera en Australia, buscarán sus primeros puntos del año en Shanghái, al igual que el brasileño Gabriel Bortoleto. Con el dominio de McLaren en ascenso y la incertidumbre en Red Bull y Ferrari, la cita en China promete ser un episodio clave en la lucha por el campeonato.