Desde hace una semana, la violencia en la colonia La Mira, en Acapulco, ha sumido a la comunidad en un clima de inseguridad. El transporte público se ha vuelto escaso, varios negocios han sido atacados y al menos cinco escuelas suspendieron las clases como medida preventiva ante los constantes hechos de violencia.
Alrededor de 150 maestros de un preescolar, dos primarias, una secundaria y un plantel de educación media superior decidieron suspender las actividades escolares hasta el regreso de vacaciones de Semana Santa, debido a los riesgos que enfrentan tanto ellos como los estudiantes.
El lunes pasado, un despachador de tortillería fue asesinado a tiros por dos hombres armados a bordo de una motocicleta. La violencia había comenzado días antes, cuando un taxista fue asesinado y, al día siguiente, una trabajadora de una tortillería también perdió la vida, mientras que una miscelánea fue incendiada. Estos hechos han generado pánico en los residentes, especialmente entre los taxistas, quienes han reducido su actividad por temor a ser atacados.